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Entrevista: SLDRP

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SLDRP es un DJ y productor de eventos de techno. Su sonido ‘underground’ se caracteriza por ser pesado y crudo. Hoy nos cuenta un poco más de su trayectoria y su visión de la música y la escena local.

Para los que no te conocen, cuéntanos un poco más de tu trayectoria.

Supongo que desde muy temprana edad empezó mi exploración musical, me fue inculcado. Ya en la adolescencia me había decantado por tendencias musicales, que en su momento histórico, se movieron en dirección futurista y revolucionaria. Creo que tengo mucha influencia del mensaje político del punk, pero el sonido de Kraftwerk, y mucho de lo que se conoce como 'Krautrock', es de lo que más me atrapó, obviamente, desde una interpretación situada en mi contexto ‘sudaca’. 

 

Creo que empecé a usar los 'decks 'en casas de amigos, como a los 19 años, pero me instruí formalmente desde el 2015. Mi proyecto como DJ lo asumo como exploración constante, creo en la música puramente sincrética. Hace unos años, radicado en Bogotá y en pausa como DJ, empecé el proyecto 'Noctem Klang', con (Nicolas) Bast y (Tobhias) Guerrero, y desde ahí, surgieron otras ideas e hilos más. 

 

El desarrollo de espacios desde la independencia y horizontalidad fue una necesidad, para ese momento (2018), el circuito de la música electrónica local todavía evidenciaba un montón de mecánicas con las que la propuesta que pretendía compartir, solo, no encajaba del todo

 

Tienes una postura muy politizada en tus redes, esta se manifiesta en tus eventos. Hablemos de 'Oppose', tu marca de eventos. ¿Por qué Oppose? ¿Qué buscas conseguir con este concepto de eventos? 

 

El punto de partida viene de las mecánicas locales de la música electrónica, que estaban normalizadas para los años en que empezaba como DJ, hace como 10 años, esto estaba plagado de elitismo, segregaciones raciales, de clase y diría que hasta de género. Felizmente, esto ha ido decreciendo en este tiempo, con la democratización de muchos espacios, pero desde esa posición y momento, se podría pensar que, las escenas artísticas pueden ser un reflejo de lo que es una sociedad, en nuestro caso la quiteña, y se pueden ver dinámicas de jerarquía, de discriminación y todo está muy relacionado al poder económico. Lo contracultural está intrínsecamente asociado a posturas críticas y cuestionamientos que se contrapongan a lo que está establecido y la cultura dominante. 

Oppose se planteó más que como una marca o promotora, como una plataforma de ideología y actitud techno, donde puedan converger diferentes propuestas que vayan en una dirección similar, la premisa no fue el protagonismo, sino algo más de fondo. Para el primer encuentro de oposición, en el 2018, asumimos lo contracultural desde una perspectiva que rompía con la hegemonía musical, hacía cuestionarnos los valores dominantes de nuestra sociedad y como eso se refleja en nuestras interacciones. Cuando empezamos, buscamos que la audiencia fuera con una mentalidad muy abierta, hablar de contracultura no puede ser solo desde un activismo agresivo, sino también, desde la igualdad, la generosidad, el respeto, la empatía. En ese sentido, se planteó abrir espacios donde esta serie de valores se vean reflejados en el contexto de encuentro o de rave, y para acompañarlo ‘sónicamente’, nuestro propósito es brindar experiencias sonoras crudas, nuestra identidad sónica representa nuestra visión, y si hablamos de contracultura, este sonido más transgresor rompe con la corriente dominante. Hablar de contracultura en nuestro ámbito, va desde lo político hasta lo sonoro.

 

Apropósito del aniversario de ODB, cuéntanos un poco más de la alianza con Dimensión Electrónica y Bastart Audio

 

Se dio de forma bien orgánica, ya teníamos la sociedad en Noctem Klang con Nicolas (Bastart Audio). Estefania (Dimensión Electrónica) venía trayendo artistas de la línea de techno que sigo y me había ‘bookeado’ varias veces, ya éramos cercanos, fue como el paso natural a seguir, el unir fuerzas.

 

En cuanto a los eventos clandestinos, el éxito y gran acogida del público es evidente. ¿Cuál ha sido la clave para lograr esto?

 

Tendré que volver a mencionar que fue una necesidad, la mayoría de nuestros eventos han sido en espacios no relacionados con los clubes o escenarios donde tradicionalmente se presenta la música electrónica, habemos quienes nos sentimos cómodos en ese tipo de espacios, para ser honesto. Oppose es un encuentro de alma subversiva, desde como se comunica la fiesta, estamos enviando un mensaje, y al hacer los encuentros en lugares que no están pensados para fiesta y salirnos del contexto de club, esto abre el panorama de las posibilidades de lo que se puede experimentar, y así también, poder recibir una propuesta sonora distinta sin prejuicios, tal vez, la audiencia, así como puede estar abierta a otras experiencias, también, puede estar abierta a otros sonidos. Aunque empezamos en la clandestinidad, hoy ya no podemos darnos esa satisfacción. Actualmente, por la responsabilidad que involucra lo que hacemos, gestionamos bajo permisos y en espacios habilitados.

 

Hablemos del exquisito sello. ¿Cómo empezó el proyecto de Noctem Klang? El nombre es una mezcla entre latín y alemán, ¿verdad? 

 

Nos conocíamos con Tobhias (Guerrero) de after parties (SLDRP se ríe) y habíamos tocado juntos en una edición techno de las fiestas “Sonoro”, que por esos años era un gran referente local, para ese tiempo, teníamos una visión similar y el techno aún era un territorio muy inexplorado en el Ecuador. Me mudé a Bogotá a hacer mis estudios en Diseño Gráfico y empezamos con el boceto del proyecto, sabíamos del sonido de Nicolás (Bast), quien para ese tiempo vivía en Berlin, y decidimos invitarlo a sumarse.

 

Creo que el primer año de Noctem Klang se manejó así, estando los 3 en distintos países, cada uno con funciones específicas en el sello. El crédito del nombre ‘Noctem Klang’ es de Nicolas, hicimos un ejercicio de lanzar ideas y así quedo el nombre, en efecto, es latín y alemán. En nuestra ‘bio’ oficial parte de lo que se describía era: “Noctem Klang enfatiza en las sensaciones a través del aesteticismo del techno, así como, conceptos musicales futuristas. Influenciados por lo visible y lo no visible, NK (Noktem Klang) es una plataforma con una orientación sónica techno, que sin embargo, también tiene apertura a propuestas electrónicas experimentales o alternativas. Creado con una intención disruptiva, contenido protestante y dinámicas de trabajo colectivas y horizontales.”

 

Noctem Klang se visionó como una plataforma para artistas emergentes independientes, hicimos lanzamientos de productores de distintas partes del globo, la curaduría siempre ha sido consensuada entre los tres, pretendiendo que esté dentro del espectro de sonido que nos identifica y sea una prolongación de los conceptos que se propusieron en NK.

 

Administrar y gestionar un label es una labor muy demandante ¿Cuál ha sido el mayor reto dentro de esta labor? 

 

Tal vez, hacer plataforma sostenible en un medio cuyos ejes están en lo eurocentrista.

 

¿Qué artistas participarán en este VA que está por lanzarse? 

 

Aun quisiéramos mantenerlo en secreto, pero puedo adelantar que hay un tremendo aporte de productores locales, se suma al sello un artista latinoamericano que es una leyenda del techno de este lado del mundo, y es uno de los artistas que ha puesto el sonido del techno latino en el mapa de la escena mundial, y también hay aporte de sonidos desde Europa

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Hablemos desde una perspectiva crítica. ¿Cómo ves la escena local actualmente? 

 

Podría hablar solo de la escena techno subterránea. En mi opinión personal, diría que está en un desarrollo mayormente positivo y que podría ser importante el considerar la comunicación consciente, ser consecuentes con lo que promovemos, esto es algo que algunos colectivos hacen muy bien, es digno de admiración. También, pensarnos mecánicas éticas, y desde ahí, el co-crear, el diálogo abierto y honesto, es de lo más necesario, porque se ponen sobre la mesa distintas perspectivas.

 

En relación a la región, tenemos un atraso de muchos años, en comparación con los países con escenas culturales fuertes en sur América, esto también por el casi nulo respaldo legal para hacer gestión independiente, mucho menos soporte por parte de instituciones del estado, la música electrónica parecería no ser parte del tejido cultural local, que está arraigado en lo más tradicionalista. Sin embargo, se ha conseguido bastante en términos de desarrollo independiente, el futuro, para ser honesto, se ve más prometedor que antes, para las generaciones próximas, aun así, diría que hay muchísimo por hacer y pensarse

Ya hemos conversado de esto, quisiera que expliques tu postura en cuanto a la tendencia del techno híper comercializado. ¿Es una moda pasajera o una propuesta artística? ¿Vale la pena sumarse a este movimiento, y juntar fuerzas, o mejor apartarse de él? 

 

Decir ‘techno’, claramente, es mencionar una palabra muy amplia, las variantes más puras del techno siguen ahí, hace no mucho, unos 5 años tal vez, tuvieron un pico de visibilidad y, tal vez, desde ahí, esta visibilidad avanzó retorciéndose hacia esta popularización actual tan ‘avorazada’. Puede parecer contradictorio que un movimiento subterráneo se popularice tanto, que la palabra techno ya no significa lo mismo que hasta hace pocos años para la psique colectiva, es un hecho. Que la palabra techno está secuestrada, también es un hecho, sin embargo las transmutaciones son inevitables (puse esto en mis redes hace unos días). ¿Se puede atravesar estas transiciones sin vender el alma? Yo creo que si ¿Se puede atravesar estas transiciones coexistiendo con estas 'transmutaciones'? De nuevo, diré que sí.

Es lo habitual que cuando una tendencia se pone de moda, los intereses comerciales intentarán, directamente, utilizarla para sus beneficios, manipulándola y transformándola sin respetar su esencia, origen y significado, siendo explotada para obtener el máximo provecho, tal vez, así es como apareció mucho del actual híbrido entre EDM y Techno, que puede aparentar evocar lo que se identificaba como música fuerte, pero en realidad, finalmente, es más digerible y fácil de asimilar para las masas, más fácil de comercializar, sin embargo la música electrónica comercial, como el mismo ‘Big Room Techno’, por ejemplo, ha coexistido con el techno siempre también. En mi opinión, no es una cuestión de BPM, en los 90s, ya había tendencias de techno influenciadas por el acid house, principalmente, con BPMs alto. En la historia del techno, parecería que estos cambios son cíclicos, si todo indica que aparecieron estas nuevas 'variantes', entonces, tal vez, la respuesta esté en el discernimiento, o en el mantenerse honesto con los ideales propios, porque de nuevo, las variantes más puras siguen ahí.

 

Personalmente, no me gusta la palabra ‘purista’, creo que se ha tergiversado y hablando de techno, paso de hacer alusión a las variantes más puras, al ser un término elitista bajo la idea de superioridad, según el tipo de música que se consume. Puede que la respuesta esté en ser conscientes de cuál es el efecto de lo que consumimos en nosotros, porque por otro lado, para quienes seguimos el techno en el contexto local, ¿estos juicios, no son parecidos a de lo que escapábamos?, ¿se nos olvida que esta música que seguimos fue, históricamente, espacio de acogida para comunidades segregadas? Desde esa perspectiva, ¿qué nos otorga un martillo de juez para condenar a otros o para decir como es correcto sonar?

 

No estoy a favor de la apropiación cultural, y no sé que sentido tiene decir eso desde la transgresión impura, que es de hecho, lo que hacemos, que el término techno está secuestrado es cierto, pensando, por otra parte, desde mi experiencia muy personal, la génesis de Oppose, se dio como espacio para escapar de una escena que juzgaba desde la música que escuchábamos hasta la ropa que vestíamos, así que, ¿emitir juicios desde ideas de superioridad, según que escuchamos, no nos volvería eso mismo de lo que huíamos? En resumen, diré que se pueden plantear muchas reflexiones pero son pocas las verdades absolutas en este tema (pero las hay), se vuelve algo más bien subjetivo. Mi postura es de oposición a la comercialización burda de esta cultura, pero me opongo también a las divisiones, las segmentaciones, las visiones ‘esencialistas’ y el odio dentro de la música.

 

En el fondo, se necesitan apuestas musicales que trasciendan más allá de los enfrentamientos, tal vez, la clave podría ser, para quien esté interesado en ello, el discernimiento, citando al gran DVS1 “Los verdaderos house y techno han sobrevivido todas las modas y ahora mismo, como hace 5 años, o 10, o 20, las modas han llegado y las modas vienen y van, por cada moda que llega hay un 5% que es auténtico y ese 5% sobrevive a la moda y el otro 95% se moverá a la siguiente moda cuando suceda”

 

¿Cuál sería tu consejo para un joven que se está iniciando en el mundo de la música techno? 

 

Explorar la música tanto como sea posible, evitar cerrar la puerta a nada que pueda aportar a nutrir de fondo el panorama sonoro propio

 

 

¿Cuál es tu ambición como DJ y productor de eventos?

 

Como gestor, me gustaría poder llevar esto más a lo público, y no vernos tan atados a la industria privada eso sería un paso muy ‘hijueputa’, que espero poder dar, como DJ, tal vez buscar otro futuro, uno más ecléctico

 

Para finalizar, ¿qué proyectos tienes para este año? 

 

No sé mucho del futuro en este momento. 

 

Gracias por participar en esta entrevista, ha sido un gusto escuchar tu punto valioso y experimentado de vista

 

Gracias por considerarme para hablar de estos temas. Fuerte abrazo.

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